Día #1 Campux Jaranda
FORMAS DE EMPEZAR. Arrancamos una edición en la que somos más fuertes, tras los veranos del COVID, retomamos costumbres a la hora de celebrar la llegada de las familias. Preparamos muchos entrenamientos con objetivos técnicos más profundos y las relaciones personales con muchísimos campuxeros que repiten año tras año son lazos fuertes y alegres. Tantos abrazos de reencuentro esta tarde. Pero también empezar para los que vienen por primera vez, para los que se pueden acordar por un momento de su madre y de su padre y los que vienen, valientes, sin amigos, para hacerlos en el Campux. Grandes. Hemos entrenado inmediatamente a la llegada, hemos conocido el nombre de quién me pasará la pelota, nos hemos bañado y hemos tenido tras la cena (Ensaladilla rusa y albóndigas) «La Noche de las Presentaciones y el Pez que salta». Nos hemos reído celebrando y nos seguiremos riendo. Hemos repasado las normas de comportamiento y el respeto que nos debemos. Las guardias nocturnas por pasillos han sido concienzudas ya que los nervios de la primera noche les afloja el músculo de la lengua y algunos tardan un poco en callar.